viernes, 25 de octubre de 2013

Thierry Duval






Thierry Duval nació en París en 1968. Sus trabajos se caracterizan por una fuerte luminosidad y precisión en el dibujo, logrando un realismo inusitado, sobre todo en sus acuarelas parisinas. Se graduó de Artes Decorativas en 1982, ilustrador y creativo en una gran agencia de publicidad en París, señala Thierry Duval y pintados desde la infancia. Hará sus primeras creaciones utilizando el concepto de la narrativa del cómic a partir de 1980, inicialmente a unos fanzines, y en diversas revistas. En 1990, un gran restaurante italiano en París el «Raffaelo», encargó la realización de copias de pinturas pastel del Renacimiento Raffael, tal vez entonces se gusto por los grandes maestros de la la pintura académica. En la preparación de la entrada de Artes Decorativas en París descubrió la obra del pintor Delacroix, y que va a su pasión por la acuarela. Esta técnica le dará una gran libertad de expresión. Pero su manera de abordar la acuarela no es común, de hecho, su registro, a diferencia de la acuarela tradicional, surge una fuerza inusual en colores y luces. Su objetivo es evocar un «impresionismo» de amanecer o atardecer en función de los temas, todo ello apoyado por un dibujo de una gran precisión. Todos estos criterios dar acuarelas Thierry Duval poder evocador, un realismo poco frecuente en la expresión habitual de la acuarela.



El jugador y el Pont Alexandre III


En cuanto al tema de su trabajo en París, disfruta de la fotografía del Sena en la madrugada, que le gusta para filtrar la luz por debajo de las cubiertas, techos brillantes en la lluvia, las siluetas de los majestuosos monumentos que surgió en el cambio de un callejón, los sonidos de París, barcazas, mercados, cafés. Le gusta observar estos solitarios transeúntes en el puente de las Artes, que le gusta disfrutar de la caída de París. Este trabajo fotográfico, nutre y le inspira en su pintura: Esto nos lleva al realismo de un París de ensueño, poético, nostálgico y atemporal.



"El lugar de Estrapade", 54 x 34 cm. C-  privada, Suiha Gallery, Tokyo


La singularidad de su trabajo se basa en esta dicotomía entre un modernismo de alta tecnología, (debido a la tecnología digital y sus aplicaciones diversas), y, por el contrario, una constancia que las referencias pictóricas s'impreignent bastante grande watercolorists clásicos del siglo pasado.

Digno heredero de la gran tradición británica de la acuarela como William Turner, Thomas Shotter Chicos, William Callow, James Holland, sino también el trabajo de Thierry Duval es una inteligente mezcla de hiperrealismo, la poesía y el refinamiento. Thierry Duval es un observador sensible y precisa de la naturaleza y la ciudad, que presten atención a la más mínima variación de la luz. Sus acuarelas recrean escenas urbanas de la belleza histórica de París, sino también el lado misterioso y raro.



La tour Eiffel y el ciclista, 100 x 62 cm. Colección privada



Es un agudo observador de la naturaleza y la ciudad. Ha retratado París en profundidad; calles, edificios, cafés, puentes... todo lo que pueda uno esperar de la gran ciudad. Aunque no sólo París es objeto de su arte; ha pintado varios sitios, e incluso una curiosa serie de las "Vacas perdidas", en las cuales las representa a en entornos extraños, bordeando el surrealismo


Anochecer en el puerto
 de Saint-Tropez


Desde 2007 expuso en los Estados Unidos en California en Palo Alto, y recientemente participó en numerosas exposiciones en Francia y en el extranjero.

Seleccionado para la 11 ª Bienal de Namur en 2009, la mayor exposición europea de acuarela.

viernes, 18 de octubre de 2013

La Apoteosis de Homero

La Apoteosis de Homero - Jean Auguste Dominique Ingres



Pintor francés. Último representante de los grandes pintores del neoclasicismo francés, Ingres se presenta sin embargo con una postura ambigua frente a los postulados clasicistas que le sitúan dentro del germen del movimiento romántico. Estudió en la Academia de Toulouse, antes de trasladarse en 1797 a París, donde fue alumno de J. L. David.

Una de las obras más impactantes de Ingres es la Apoteosis de Homero, en la que aparecen nada menos que 45 personajes alrededor del mítico poeta heleno. La escena se desarrolla en las gradas de un templo clásico presidiendo el conjunto Homero, cubierto con una túnica blanca y portando en su mano izquierda una vara. La Victoria alada - inspirada en Rafael - le corona y sentadas a sus pies encontramos las figuras que representan a la "Ilíada" - izquierda - y a la "Odisea". Junto a la "Iliada" destaca una figura con manto azul que sujeta de la mano a otro personaje: son Apeles y Rafael, demostrando así Ingres sus principales raíces artísticas. 



La Apoteosis de Homero

El cuadro fue un pedido que le hicieron a Ingres para decorar la sala Clarac, en el palacio del Louvre. La escena no deja de ser bastante rígida, como la mayor parte de imágenes de este tipo. Sin embargo, el colorido que aplica Ingres en los trajes anima la composición, realizando más de 300 dibujos para ejecutar este excepcional conjunto. 

Ingres imaginaba dos grupos en gloria, los homéricos viejos y los modernos. A todos los situó alrededor de Homero, al que homenajean .Ingres muestra el momento en que una mensajera de los dioses pone en su cabeza el laurel de la inmortalidad. A los pies de Homero se puede ver a sus dos hijas épicas: la Ilíada y la Odisea.


La Iliada y la Odisea


Homero, llamado el padre de la poesía griega, vivió 300 años después de la guerra de Troya. Compuso la Ilíada, poema en que refiere la guerra de Troya, y la Odisea, poema épico en que canta los viajes y los contratiempos que experimentó Ulises cuando de aquella guerra regresó a sus lares. Ambos poemas constituyen la primera y por consiguiente la más antigua historia de los griegos. 

Podemos observar a Homero que es coronado por la Victoria, o la alegoría de la Humanidad (al parecer no hay acuerdo en la exégesis de esta rafaelesca figura alada). Sentadas a sus pies, como si de prolongaciones de las patas del trono se tratara, se encuentran las personificaciones femeninas de la Ilíada y la Odisea, con los símbolos que las identifican: la espada y el remo.

De los invitados más cercanos al gran Homero, Ingres destacó a Apeles, el único con un manto celeste y conduciendo de la mano a Rafael, gesto que resumiría la personal profesión de fe artística de Ingres.



Apeles, con un manto celeste


Se puede observar que la simetría es estricta, tanto los personajes, las figuras están situadas a cada lado de Homero y la arquitectura, esta centrada y medida.

La composición es clásica y frontal, Ingres no empleo la perspectiva vertical como lo hacían los pintores Barrocos para las obras que estaban destinadas para los techos. El tema es demasiado intelectual, al cual le falta espontaneidad. 

Frente al pintor griego y el divino artista de Urbino, el pintor situó a otra pareja de inmortales, Fidias, ofreciendo a Homero sus útiles de escultor y, tras él, a Miguel Angel. En la parte inferior de la escena otros tantos amigos nos dirigen sus miradas y nos invitan a sumarnos al homenaje: Poussin a un lado yMolière al otro, rodeados de literatos franceses. Como no podía ser de otro modo, no olvidó Ingres a los músicos desde el mítico Orfeo, junto a Homero, a Gluck y su predilecto Mozart, a la sombra de Poussin.



Orfeo y los músicos


Algunos personajes se reconocen por sus atributos como: Dante, Pericles, Aquiles enrolla un pergamino, Moliere o Poussin (Ingres copio su autoretrato con una exactitud fotografica.

Los personajes de la derecha le ofrecen regalos: Dante le ofrece sus obras, el escultor Phidias su mazo, Alejandro el cofre donde guardaba las obras del poeta. Estos otros personajes se reparten el espacio: Horacio, Pisístrato, Licurgo, Virgilio, Safo, Alcibíades, Eurípides, Menandro, Demóstenes, Sófocles, Esquilo, Heródoto, Lino, Museo, Píndaro, Hesíodo, Platón, Sócrates, Pericles, Aristóteles, Aristarco, Alejandro Magno, Esopo, Shakespeare, La Fontaine, Tasso, Corneille, Racine, Boileau, Longinos, Fénelon y Camoens.

viernes, 11 de octubre de 2013


El taller del arte de los Masriera

No es habitual encontrarse un templo romano encajado (literalmente) entre bloques de pisos modernos. Pues esta es la sorpresa que te vas a llevar si bajas andando por la calle Bailén de Barcelona, una vez cruzas Consell de Cent.
El arquitecto Josep Vilaseca - el mismo que el del Arco del Triunfo de Barcelona - fue el encargado de alzar este templo taller a imagen y semejanza de lo que se supone que fue el antiguo templo de Augusto del foro romano de Barcino. En una foto del archivo fotográfico de Barcelona podemos apreciar su imponente grandeza cuando ningún edificio le hacía sombra.

Sin embargo, se trata de una edificación del s. XIX, concretamente del 1884, que albergó el taller de los hermanos joyeros Masriera (si os fijáis, podréis observar las iniciales de sus nombres en las dos estrellas de la puerta que da acceso al templo).


Taller Masriera al C/ Bailén - Barcelona 


Construido a finales del siglo XIX, y ennegrecido por la polución, este edifico de estilo neoclásico se levanta majestuoso con sus 6 columnas corintias que sujetan un frontispicio triangular.


Detalle de las columnas 


En los extremos superiores destacan sendos grifos - animal mitológico mitad águila, mitad león - custodios de los tesoros que se pudieran ocultar en ese lugar. De hecho, el oro si que debió estar presente, ya que la casa fue ordenada construir por los hermanos Masriera para ser usada como taller de orfebrería, escultura y pintura. Aún hoy, esta familia posee su joyería en el Paseo de Gracia, entre Consell de Cent y la calle Aragón.


Uno de los grifos

Actualmente, es sede de una congregación religiosa llamada: la Pequeña Compañía del Corazón Eucarístico de Jesús, aunque, tiempo atrás, cumplió sus funciones como teatro.

Interior del taller Masriera


Los hermanos Masieera se instalaron en la calle Bailén para elaborar sus reconocidas joyas modernistas, no es una simple coincidencia ya que, precisamente, esta calle fue el lugar destinado durante el s.XIX a los grandes talleres y artesanos de la ciudad, dada la proximidad y a la vez suficiente distancia del centro. De esta manera, en la esquina de la misma calle Bailén con Diputación, en lo que actualmente es el Colegio del Sagrat Cor, se ubicaba un gran taller que englobaba distintos oficios de artesanos, y, del mismo modo, en la esquina con Gran Via de les Cortes Catalanes.



Interior del taller Masriera que a partir del 1913 va passar
 a ser l'Estudi-Museu. Arxiu Jordi Miralles 


Paralelamente al mundo de la joyería, también destacaban en la pintura, consiguiendo también un gran éxito entre la alta burguesía de Barcelona y exponiendo incluso en la Sala Parés. La obra, a pesar del aspecto misterioso que tiene en la actualidad, no deja de impactar. Pero en el momento en que se construyó aun impactaba más, pues los edificios anexados que hoy en día lo rodean no habían sido construidos todavía y el Eixample actual todavía estaba en proceso de urbanización. La influencia del templo es claramente clásica. Cabe destacar los numerosos dibujos hechos por el arquitecto Vilaseca de edificios clásicos en viajes a Roma y Atenas y la similitud con la Masion Carrée de Nimes, el Partenón de Atenas y las columnas del antiguo templo de Augusto en Barcelona, concretamente en la calle Paradís, en el interior de la sede del Centre Excursionista de Cataluña. 


La entrada principal en la verja repleta de estrellas de 5 puntas



viernes, 4 de octubre de 2013

Jan van Kessel



Jan van Kessel



Fue miembro del gremio de Amberes en 1645 y perpetuaba el arte de su abuelo Jan Brueghel el Viejo (1568-1625) y estaba influenciado por Daniel Seghers (1590-1661).
Hijo del homónimo Jan van Kessel "el Viejo", pintor de flores y animales, llegó a Madrid acompañando a una familia noble flamenca .Pintor de la reina María Luisa de Orleáns y más tarde también de Mariana de Neoburgo, trabajó con Isidoro Arredondo y Sebastián Muñoz en la decoración de la Galería del Cierzo en el viejo Alcázar de Madrid, donde le correspondieron dos de las historias de Psique y Cupido. Leal a la anterior dinastía, a la muerte de Carlos II Van Kessel acompañó a Mariana de Neoburgo a Toledo donde se alojó en casa de José Jiménez Ángel.








Jan van Kessel (Amberes, 1626-idem, 1679) pintor flamenco de naturalezas muertas, establecido en España donde se le conoce como Jan van Kessel, el Mozo conocido en España como Juan Vanchesel, fue un pintor de origen flamenco establecido en Madrid en 1679.







 Trabajó con Isidoro Arredondo y Sebastián Muñoz en la decoración de la Galería del Cierzo en el viejo Alcázar de Madrid, donde le correspondieron dos de las historias de Psique y Cupido. Leal a la anterior dinastía, a la muerte de Carlos II,  Van Kessel acompañó a Mariana de Neoburgo a Toledo donde se alojó en casa de José Jiménez Ángel. 





De Jan Van Kessel se conserva una variada u abundante obra en la que se incluyen pinturas de flores, bodegones, animales, paisajes, alegorías, y cuadros religiosos, Trabajó principalmente el pequeño formato, sobre soporte de tabla o de cobre.Sus cuadros de flores, con vasos de porcelanas o cristal siguen los cánones establecidos por Brueghel, pero sus guirnaldas están claramente inspiradas en la obra de Daniel Seghers.





En su etapa de madurez, realizó los bordes decorativos de una serie de viente pinturas que ilustran la vida de los nobles sicilianos de origen español. A Partir de mediados de la década de 1655, produjo una original serie de pequeños cuadros en los que pintó, con gran minuciosidad y realismo, mariposas, insectos y caparazones.